30 Nov Sumar en inglés
Violeta. 14 años. Conocí a su madre cuando decidió venir a contarme su historia. Una niña responsable y muy trabajadora, pero cuyas dificultades con el inglés cada vez parecía que tenían peor solución. Con la asignatura pendiente del curso pasado, se enfrentaba en septiembre a un 3º de la ESO con esa horrible sensación de llegar al cole, a su primera clase de inglés, y no entender nada. Como siempre nos explica nuestra profe Bea, el inglés es como las mates, si no sabes sumar, no puedes aprender a multiplicar. Y al ir avanzando los cursos, el problema se va haciendo más grande. Después de probar sin éxito diferentes opciones, Violeta y su madre decidieron que comenzara en octubre a clase en nuestra academia de inglés, Taylor School. Le hicimos una prueba y enseguida vimos cuales eran sus necesidades. Solo hacía falta presentarle a sus compañeros, (chicos y chicas que estaban en su misma situación, lo que ya hizo que se sintiera relajada, al estar en el nivel adecuado para ella y con compañeros de su misma edad) y comenzar.
Este tipo de clases conllevan dificultades añadidas. Hay que aprovechar muchísimo el tiempo, y hacer un gran esfuerzo por parte del profesor y de los alumnos. Cada día Beth buscaba la forma de despertar su interés y motivación. Encontró una puerta abierta en la creatividad y las canciones, que hacían a Violeta aprender a comunicarse en inglés, disfrutando y sin presión, con empatía y sin miedo. A Violeta le gustan mucho las bromas de Beth, yo creo que más aún porque son en inglés y las entiende.
Llegar cada día a clase, sabiendo que te vas a reír, vas a aprender, a jugar y a disfrutar sin tener la presión de aprobar un examen, facilita mucho las cosas.
Beth se ocupa de ir saltando en el libro los temas que aún no están en condiciones de aprender y solo sirven para sentir fracaso y frustración. Ya llegará su momento!. Tarde o temprano, pero siempre mejor en su momento, llegarán los 3º condicionales.
Fueron pasando los meses del curso y Violeta se esforzaba cada día más por escalar las dificultades del aprendizaje, porque se veía capaz. Ella misma iba notando como mejoraba su expresión oral y escrita ¡había aprendido a sumar en inglés!
Fue en el mes de mayo cuando volvió su madre a verme. Su cara era muy diferente de la de aquella mamá preocupada y agobiada que vino en septiembre. No tarde en contagiarme de su enorme sonrisa cuando me dijo que Violeta, no solo había aprobado el inglés pendiente del curso pasado, si no que llevaba fenomenal el inglés de 3º de la ESO!
¡Os recomiendo a todos los padres! me dijo la mujer con todo el agradecimiento del mundo…
Violeta alcanzó buen nivel y Beth, su profesora, le propuso presentarse a un examen de Cambridge. Su madre dijo que eso le había dado tal subidón de autoestima, que quería ya reservar plaza para continuar aprendiendo inglés con nosotros el próximo curso.
Y esto es lo más bonito que nos puede ocurrir en nuestro trabajo.
Quiero felicitar a Beth por su enorme esfuerzo, por hacer magia en sus clases y ayudar a niñ@s como Violeta a querer seguir aprendiendo. Estamos seguros de que muy pronto aprenderá a multiplicar en inglés!
*Las historias son reales pero los nombres de nuestros alumnos son inventados para preservar su intimidad.